Menudo problema. Creo que de nuevo me encuentro en ese punto en el que las cosas no están claras. Ese punto en el que reaparece un nudo grande, uno de esos que solo con observarlo desesperan antes de empezar.
Pero, ¿quién dice que no seas capaz de desenredarlo y conseguir una cuerda extremadamente larga, por muy imposible que parezca? Cabezota por naturaleza, día tras día intento desenmarañar sus enredos, pero en ocasiones, da lo mismo de qué extremo tires, el nudo se aprieta más, lo das por perdido, y esperas a tener más paciencia al día siguiente.
Este es un día en el que me he levantado con ganas de avanzar y desbaratarlo un poco más. Me detengo unos instantes, olvidando si debo planificar o acordarme de algo, olvidando obligaciones y dejando a un lado el tiempo. Pero miento si digo que lo consigo por completo.
Soy quien creo que soy, pero en realidad no tengo la menor idea. Voy dando tumbos y siempre lo haré, pero eso no responde adónde voy.
"Yo quiero ser persona", me digo convencida. Pero, ¿qué es ser persona? De nuevo me encuentro tirando de un lado del nudo que no parece que tenga ni principio ni final y sólo puedo fruncir el ceño y cruzarme de brazos frustrada.
Llego a la conclusión de que no sabemos lo que queremos ser hasta que empezamos a serlo, y cuando por fin nos hemos convertido en eso que tanto anhelábamos, no nos damos cuenta. Qué fácil sería ser lo que sale de dentro, espontáneo y natural, sin enrevesamientos y complicaciones.
Oh, ese nudo aparece en mi vida en todo momento!
Defines muy bien las situaciones y en fin... que más decirte, que me encanta ;) <3